A las 6 de la mañana, llamaron a la puerta del dormitorio de Zach. El abuelo de Zach dijo con voz grave: “Tu abuela ha desaparecido”.
La abuela de Zach, de 87 años, que tiene Alzheimer, había desaparecido... ¡otra vez!
Con la ayuda de los vecinos, comenzaron su búsqueda. El abuelo rápidamente se puso en contacto con la policía y puso carteles de aviso. Amigos y familiares publicaron en los redes sociales con la esperanza de ampliar la búsqueda.
3 días después, la abuela aún no se había encontrado por ningún lado. Se recibieron muchas llamadas telefónicas, que resultaron decepcionantes, y Zach estaba perdiendo la esperanza.
“Ella fue diagnosticada hace más de 10 años. Hemos probado varias terapias diferentes y rehabilitación. Cuando no funcionaron, los médicos le dieron todo tipo de medicamentos. Pero aún así, no había signos de mejoría.”
“Se fue de la casa varias veces, pero sólo tardaba de 1 a 2 horas en volver a casa. Esta vez ha sido demasiado tiempo. Sólo espero que vuelva a casa pronto.” - Zach
Pasaron los días, se pusieron más ansiosos y comenzaron a prepararse para lo peor. Entonces, de la nada, la abuela de Zach entró despreocupadamente por la puerta. Las lágrimas de Zach brotaron, todos se sintieron aliviados y le dieron abrazos. Estaban tan emocionados que no vieron al hombre detrás de ella.
Se presentó como Neil Herbert, un investigador bio-médico que pasaba su tiempo en un pueblo. Explicó que conoció a la abuela de Zach en la estación de tren. Estaba perdida y confundida, así que trató de ayudarla a encontrar su camino. Preguntó por todo el pueblo, pero sin éxito. Así que la llevó a su casa para que descansara.
En ese momento, estaba investigando sobre la fruta de la bergamota. Naturalmente, su casa estaba llena de olor a bergamota. Gradualmente, la confundida abuela comenzó a relajarse. Su ansiedad se redujo significativamente, su confusión se aclaró.
“Quería reunirme con un viejo amigo mío. No sé cómo terminé a más de 800 millas de casa.” - Abuela
Poco a poco, recordó el camino a casa.
Viendo cómo el aroma de la bergamota ayudó a esta abuela, Neil decidió investigar más sobre la fruta de la bergamota y su efecto.
Su investigación demostró que la cáscara de la bergamota produce un aceite que explica su olor distintivo, y que estimula las células cerebrales, suprimiendo la agresión, la agitación y otros síntomas psicóticos. Ayuda a elevar el estado de ánimo y calma la mente, estimulando el funcionamiento cognitivo y la memoria.
Con este conocimiento, Neil creó BargaBoost™ con la esperanza de ayudar a las personas con demencia en todo el mundo.
Se trata del aceite de bergamota concentrado extraído directamente de la cáscara. Puedes aplicarlo en tus sienes antes de acostarte, ponerlo en un difusor de aceite, o añadirlo a tu baño. El olor se abrirá paso a través de la nariz, estimulando los receptores olfativos y extendiéndose a todo el cerebro, reduciendo los riesgos de declive cerebral.
Cada 3 segundos, alguien en el mundo desarrolla demencia. El mayor factor que causa la demencia es la edad. A medida que envejecemos, nuestras células cerebrales se deterioran y mueren lentamente. Esto causa la incapacidad de realizar actividades fundamentales como recordar, resolver problemas, encontrar palabras y mucho más.
Aunque es una enfermedad común, ahora se puede prevenir. Nunca es demasiado pronto para tomar medidas preventivas. No dejes que las fotos sean lo único que preserve tus recuerdos. Las fotos pueden ser eliminadas, pero tus recuerdos no deberían.